lunes, 10 de marzo de 2014

50%EPITAPH

            He ido suturando las heridas del olvido con el hilo de un tiempo desgastado. A duras penas contengo los recuerdos que afortunadamente fueron o que simplemente quisieron recordarme. He ido muriendo sucesivo en ignoradas celebraciones anuales más veces de las que yo hubiera concedido. Ahora una más no importa, estoy vencido, pues las libaciones que me quedan son escasas, como escasas son las hojas en el calendario de un camino que se cesa.

            Un rumor sordo a tiempo convenido me invade desde la profunda garganta de un abismo que se antoja duro e insondable. Voy apaciguando mi sangre aleatoria con tu deseo apenas camuflado y como la pimienta sorda en nuestra boca, que irrita hasta que anestesia, así los sentimientos han sido desprovistos de todo su peligro.

            Abrigo perfumes nuevos en la incesante escalera que me arrastra hasta tu sombra. Profundizo en lejanas letanías de porvenires futuros y me enredo como la hiedra en tu cuerpo simulando el alambre de espino fronterizo. Transfieres tu sangre hacia mis venas en criogénicos espasmos de sucesos compartidos y así de rítmicos nos volvemos cuando el fragor termina con la fuerza del hechizo.

            Ya no me queda ni media vida, pero si su porcentaje a doble paso. Giraremos más rápido, como Venus, pues en esta Tierra todo va acabando.
      
            Ahora ya soy más, pues tu cuerpo cubre los bocados que me han dado.

1 comentario:

  1. Decir no a una melodia monótona y doblar el compás cuando hace falta.
    Cuanto aprendo de ti hermano!
    Un abrazo

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