martes, 19 de abril de 2011

BIEN, ¿NOS BAJAMOS YA LOS PANTALONES?

Los altos directivos del Ibex ganan 19,5 veces más que sus empleados. Es lo que se llama hacer equipo.
El competente gurú del Banco de España, Fernández Ordóñez, se propone vigilar de cerca los emolumentos de aquellos banqueros que superen el millón de euros al año. Teniendo en cuenta la solvencia demostrada por las entidades bancarias: hasta ahora, a que coños se dedicaba este tio.
¿Le pedirá a dichos directivos moderación salarial, como hace con el resto de trabajadores de este país?. Lo mismo hasta se ha hecho de izquierdas.
Telefónica revisa el Plan de Incentivos para la cúpula de la multinacional, destinando hasta 450 millones de euros para retribuir a los 1.900 miembros del equipo directivo. No me extraña que se dedique tanto dinero si casi hay más generales que soldados.
Por el contrario, pretende recortar el 20% de su plantilla en España en los próximos tres años, lo que supone unos 5.800 puestos de trabajo. Es lo que llaman desde la cúpula de la CEOE luchar contra el paro.
Telefónica anuncia unos beneficios de 10.000 millones. Visto lo de arriba, pronostico que para el próximo año, serán el doble. Solamente habrá que aderezarlo con contratos basura en cualquier país del tercer mundo en que amplien la empresa.
Es así como esta empresa ayuda a los países en vías de desarrollo. Les recomiendo nuevos lugares para su sede: Palermo, Nápoles o cualquier lugar de la costa somalí. Vuelven los cuatreros.
Rubalcaba dice que no está de acuerdo con el recorte de plantilla de Telefónica. Seguramente lo discutirán el presidente del gobierno y Botín en su próxima reunión. Viva Zapata, digo, Zapatero.
Se han producido privatizaciones de sectores rentables y al mismo tiempo recortes salariales y sociales que no han contribuido a la reactivación económica ni a remediar el problema del paro. Viva el socialismo místico y la alianza de civilizaciones.
Cuando hay crisis, ¿que piden los empresarios?: abaratar el despido y reforma laboral a la baja para conseguir la recuperación. Cuando no hay crisis, ¿que piden los empresarios?: abaratar el despido y reforma laboral a la baja para seguir en la senda de la bonanza. Es el ideario empresarial: si estamos mal para estar bien y si estamos bien para estar mejor. En todo caso, siempre hay un colectivo que sale perdiendo. Ellos no.
Es lícito que pagemos todos el recorte de plantilla de Telefónica a través del desempleo y jubilaciones anticipadas, en una empresa que ha tenido esos beneficios. Para ellos sí, así ganan más.
El gran presidente del Real Madrid y de la constructora ACS, ha pedido reformas profundas y dolorosas para avanzar hacia un nuevo modelo productivo. Este también estudió con Fernández Ordoñez y Alierta. 
Mientras tanto, la Tabarra Santa continúa imparable sumiendo al personal en el letargo propio de tanta manifestación religiosa. Es normal que luego no queden fuerzas para salir a reclamar nuestros derechos. Todos se los ha llevado en bonus nuestro Señor. Por lo menos escribe un último mensaje a Movistar, mandándolos a la mierda y date de baja del teléfono móvil, adsl y teléfono fijo. Tu pequeña acción puede ser enorme a gran escala.  

Estoy con Cayo Lara, Coordinador de IU: "los despidos en una empresa con 10.000 millones de euros de beneficios deberían estar tipificados como delito".

 Un saludo.

jueves, 14 de abril de 2011

TU A BUSINESS Y YO A TURISTA

A través de las redes sociales, sobre todo twiter, hemos sabido que los eurodiputados del Parlamento Europeo, han votado en contra de una proposición, no vinculante, en la que se pedía que dichos eurodiputados viajaran en clase turista, en lugar de business y se recortaran otras prebendas de las que disfrutan en virtud de su cargo. En tiempos de crisis como los que vivimos sería lógico que dicha proposición hubiera salido adelante. Pero no. Los mismos políticos que nos piden sacrificio y moderación para salir de la crisis se niegan a aplicarse a si mismos esa misma receta.
En cierto modo puedo entenderlo de los políticos alemanes, franceses, o de países que han sabido afrontar la crisis a la primera y cuyos estados están saliendo de la misma con cierto desahogo económico. Pero, que coños pintan los eurodiputados españoles, salvo honrosas excepciones, votando a favor de mantener privilegios elitistas como si el esfuerzo para salir de esta situación crítica no les resultara aplicable. Deben de creer que vivimos en la India y que ellos pertenecen a la casta superior y nosotros, sin embargo, a la casta de los parias. Más absurdo todavía es pensar que un eurodiputado portugués haya votado en contra cuando su país ha pedido el rescate económico y se avecinan medidas drásticas en contra de los trabajadores y demás colectivos sociales. Con que cara pedirá sacrificio a sus conciudadanos. Supongo que con la cara dura. En el mismo caso están los eurodiputados griegos e irlandeses. Para el resto de miembros de la Eurocámara debe ser penoso ver como los políticos elegidos en los países rescatados dan clases de economía en la tribuna parlamentaria europea cuando sus colegas de los parlamentos nacionales son incapaces de dirigir a sus países a la senda de la normalización.  

Pero volvamos con el caso de los eurodiputados españoles. Todos sabemos lo que significa ser eurodiputado. Por regla general son esos políticos amortizados en sus partidos y en la vida política nacional y que como retiro dorado los mandan al Parlamento Europeo para que no estorben. No debería ser así, pero es lo que hay. Un claro ejemplo es Mayor Oreja. Aunque en todos los partidos ocurre. Después de casi una legislatura sin saber nada de ellos, los muy incapaces, se hacen notar poniéndose en contra de la mayoría de los ciudadanos de la U.E., los cuales demandan a los políticos, que se supone que los representan, una vuelta a los valores tradicionales de honradez y ética que haga que volvamos a confiar en ellos y en el sistema político que no hemos dado.
Dada la alarma que esta votación ha creado en los ciudadanos a través de la redes sociales, los partidos políticos señalados se ha apresurado a dar explicaciones de lo sucedido, a cada cual más absurda. El P.P ha prometido estudiar lo acontecido con sus eurodiputados. Esto da la impresión de que aquéllos van por libre sin que desde la dirección del partido se marquen directrices en los temas a tratar en el Europarlamento. En caso contrario solamente sería una burda tomadura de pelo. El PSOE por su parte ha explicado que la intención de sus europarlamentarios era votar abstención. O sea que dejo la decisión para el resto y si sale como realmente salió, decir que ellos no habían votado en contra. Desde luego gran trabajo el suyo. Parece mentira que no sepan que lo realmente correcto era votar a favor, en consonancia con lo que el gobierno de su partido está exigiendo a los ciudadanos de su país.
Para terminar, solamente una reflexión: si a los escritores les pedimos que hagan buenos libros, sería justo exigir a los lectores que compren esos buenos libros y no tonterías encuadernadas. De la misma manera sería justo que si a los políticos les exigimos trabajo y responsabilidad, además de honradez, los ciudadanos tengamos esa misma responsabilidad a la hora de emitir nuestro voto. Solamente lo hacemos cada cuatro años. Luego no es admisible quejarnos cuando en muchos de los casos estaba cantado el resultado. Ya es hora de hacernos mayores y tenemos unas elecciones a la vuelta de la esquina para demostrarlo. Como ejemplo, tenemos la lista electoral de la Comunidad Valenciana en la que hay siete u ocho imputados.
Un saludo y espero vuestros comentarios.        
P.D.:¿vendrá Mayor Oreja a la Semana Santa de Zamora en business o en turista?

jueves, 7 de abril de 2011

¿QUIERE SER ZAMORA UNA CIUDAD TURISTICA?


Como preámbulo a la época que se nos avecina, poco a poco todos los actos cotidianos se han ido empapando de un barniz semanasantero, que por mucho que uno lo intente,  es imposible  evitar. A la polémica recurrente sobre el papel de la mujer en la Semana Santa, parece mentira que estemos en el siglo XXI, que aparece a principios de año y muere siempre cuando se acerca la fecha del primer desfile procesional, el tema de las bandas de música con el conflicto subyacente entre las cofradías con mayor número de pasos y las llamadas pequeñas, etc., este año se añade un conflicto lateral, pero de mucho calado: que el 23 de abril, día de la Comunidad, cae en Sábado Santo. Esto produce un puente de cuatro días festivos sin que los comercios puedan abrir sus puertas.

En los diversos medios de comunicación han ido apareciendo sucesivas noticias sobre las negociaciones llevadas a cabo entre los empresarios y los sindicatos que pudieran posibilitar la apertura de los comercios el día 23 de abril. Supongo que todos tienen algo de razón y ninguno está en posesión de toda la verdad. Parece ser que los sindicatos han vinculado la posibilidad de apertura a la negociación de los convenios colectivos en los distintos ramos y empresas. Los empresarios por su parte no aceptan esta condición a priori para sentarse a negociar. La  Administración, con esa sensibilidad que le caracteriza, amenaza con inspecciones de trabajo y multas a los comercios que por su cuenta abran dicho día, y la cúpula empresarial ya se lo ha hecho saber a sus asociados.

El que haya cuatro días festivos supone para Zamora una posible afluencia de turistas muy significativa, si el tiempo lo permite. Zamora lleva ya unos años intentando posicionarse en el mercado de ciudades turísticas ofreciendo al viajero su románico, su modernismo, sus paisajes y naturaleza, su gastronomía y, cómo no, su Semana Santa, declarada de Interés Turístico Internacional. No lo olvidemos. Siempre se ha dicho que la ciudad triplica su población durante estas fechas, y por tanto es una oportunidad de negocio básica para la economía local. Todos hemos sido turistas alguna vez y nos gusta que cuando estamos en cualquier ciudad, ésta nos ponga al alcance de la mano todas las ofertas que promociona.

 Si Zamora quiere vivir del turismo tendrá que cambiar su mentalidad, sobre todo los actores arriba mencionados, adecuando su estructura económica y productiva al ritmo del sector turístico. No es posible vivir del turismo dando a entender a los que llegan que si quieren hacer alguna compra deberán esperar hasta el lunes. Para que nos entendamos: la gente que viaja, trabaja de lunes a viernes y viaja el fin de semana y los festivos. Pues bien, nosotros tendremos que trabajar esos días. Para esta ciudad también los días festivos son de trabajo. Imaginaros todos los comercios abiertos, de ropa, zapatos, de alimentación, etc. Y miles de posibles clientes paseando por la ciudad. Creo que es un error lo que va a pasar en Zamora. Salvo que alguien me razone que Zamora no necesita al turismo porque tiene grandes industrias que absorben toda la mano de obra posible.

Y ya no solo es la Semana Santa. La próxima apertura de un campo de golf en la ciudad, el nuevo teatro Ramos Carrión, que posibilitará la escenificación de grandes obras y conciertos, pueden atraer a un turismo de calidad que necesita que todos los servicios estén a su disposición las 24 horas del día, los 7 días de la semana y por tanto Zamora, de una vez por todas, debe de afrontar este hecho cuanto antes mejor. Y todos los partidos políticos deben remar en este sentido.

Y para los ciudadanos en general, y aunque sería otro tema a tratar, este ejemplo paralelo: a que nos gusta llegar a una ciudad nueva, buscar un aparcamiento subterráneo y dejar el coche en el centro para andar lo menos  posible. Pues eso. Eso hay que ofrecer, exactamente lo mismo que exigimos. 

Un saludo.