TODOS LOS POLITICOS SON IGUALES

¿Tiene dinero de sobra?. Pues nada. Métalo en un banco cualquiera. Su banco cogerá ese dinero y lo colocará en los mercados internacionales, ganando sus plusvalías correspondientes que pasarán a engrosar la cuenta de beneficios. A usted no le darán nada, solamente un raquítico interés, que casi es como una broma. Eso sí, durante ese tiempo le habrán cobrado por tener la cuenta, por mantener las tarjetas de crédito, por transferencias, etc. Doble ganacia. Viene todo esto a cuento de lo que está pasando en Irlanda. El llamado tigre celta se ha encontrado de pronto con que tiene su economía casi en fase terminal. Lo cual es lógico si tenemos en cuenta que su modelo de crecimiento se basó casi exclusivamente en la llamada economía financiera, con poco consumo interno (muy pocos habitantes) y poco sector industrial (vease el caso de Islandia). Con los primeros indicios de la crisis, el estado irlandes, como si hubieran descubierto la polvora, avaló con sus fondos, provenientes de los impuestos que pagan sus ciudadanos, el capital de los bancos que operaban en su territorio. Como la crisis se ha recrudecido y los bancos no levantan cabeza, resulta que el pib del estado se ha disparado al 30%. Y ahora viene lo bueno: Europa sale al rescate de Irlanda, pero poniendo sus condiciones. Ya os las estaréis imaginado. Despido de funcionarios, congelaciones de pensiones y de sueldos, subida de impuestos. Como siempre, la receta del tonto del pueblo. ¿Que culpa tendrán los ciudadanos irlandeses de la ineptitud de sus gobernantes?. Los trabajadores y pensionistas tendrán que salir, por decreto, al rescate de su gobierno que en realidad es salir al rescate de sus bancos. El mundo al reves. Como apunta el título de esta entrada, los políticos, sean del país que sean, actuan de la misma manera en estos casos, sangrando a los trabajadores. Las mismas recetas de primero de EGB las aplican los socialistas en España y los conservadores en Irlanda. ¿Habrán ido a los mismos colegios de pago?. Espero que cuando pase la crisis seamos capaces de exigir explicaciones a estos lumbreras de la economía. Que a la hora de votar lo hagamos pensando un poquito en lo que estamos haciendo. Para que no haya equívocos, os diré que los que pueden entrar, sobre todo aquí en España, no son mejores. Solamente han abierto la boca un poquito y dan miedo, asi que os podéis imaginar lo que harán cuando lleguen al poder: volveremos a la época que dibuja, de manera ejemplar, Miguel Delibes en su novela Los Santos Inocentes. En fin, que si no vais a pensar, ni siquiera un momento, en el sentido de vuestro voto, haceros una tortilla de patata e iros al campo a merendar. Eso sí, podéis sentar a un banquero a vuestra mesa, ellos os necesitan. Al revés que en la película dirigida por Luis García Berlanga, Plácido, que los ricos sentaban a un pobre a la mesa.